CAPITULO III EL DESTINO DEL DOBLE ETEREO El doble etéreo es el duplicado del cuerpo grosero del hombre. Se le ve algunas veces durante la vida en la vecindad del cuerpo, y sus salidas de éste se notan generalmente por la pesadez o semi letargo del mismo. Actuando como el receptor o vehículo del principio de vida durante la vida terrestre, su separación del cuerpo se señala naturalmente por el descenso de todas las funciones vitales, aún cuando el cordón que une a ambos esté todavía intacto. Como se ha dicho antes, el rompimiento de este cordón acarrea la muerte del cuerpo. Cuando el doble etéreo deja finalmente el cuerpo, no se va a distancia de éste. En los casos normales permanece flotando sobre él, siendo su estado de conciencia soñoliento y tranquilo, a menos que al lado del cadáver que acaba de abandonar, haya manifestaciones ruidosas de dolor y emociones violentas y aquí conviene decir que durante el lento proceso de la muerte, mientras el doble etéreo está efectuando su separa